Mucho se habla del desamor, pero pocas veces del que nosotros no compartimos, de cuando alguien nos hace ese regalo maravilloso del amor y por desgracia no lo correspondemos.
No sé si esto les habra pasado alguna vez...
Debe resultar tremendamente doloroso, intentar día a día ver a esa persona "con otros ojos" sin ningún éxito.
Además, no sé porqué, pero aquellas personas que aman y a las cuales no se les corresponde, suelen ser seres maravillosos plagados de virtudes, con lo cual el sentido de culpa es mayúsculo...
¿Como no puedo querer a alguien tan perfecto?
¿Como no puedo querer a alguien tan perfecto?
Y es que como dice la canción... en el amor no se manda... y muchos tendemos a enamorarnos de quienes menos lo merecen.
Lo que se convierte en "misión imposible" es llevar una amistad fluida con el "que te ama". La relación amistosa se frustra totalmente en cuanto
entra en escena el amor del otro.
Ya no son iguales las confidencias, ni las muestras de cariño, ni los actos de sinceridad suprema. Ahora hay que ir con cuidado de lo que se dice o hace para no "herir sensibilidades"... para no "dar pie a que pudiera pensar que es correspondido", etc.
Ya lo dice el refrán;
"Cuando el amor entra por la puerta, la amistad salta por la ventana".
"Cuando el amor entra por la puerta, la amistad salta por la ventana".
Es este el amor que nos convierte en los malos de la película, a pesar de lo durísimo que es comprobar que somos el motivo de las desdichas y lágrimas de un ser maravilloso.
Sé que alguna vez ha pasado, y debe resulatr muy dificil. Por querer evitar un daño, se provoca un sufrimiento mayor, que si nos hubièsemos alejado meses antes, y al final tuvimos que hacerlo.
Desde aquí digo que...
"Quién no corresponde nuestro amor, no lo merece"... y eso me incluye a mí.
2 comentarios:
Qué fuerte la frase final, no había puesto atención. Creo que hemos estado en ambos lados. La cosa está en saber qué hacer en uno y otro. En el lado del amado ofrecer estabilidad para el otro o largarte. En el caso del que ama, saber que no habrá más y permanecer o también largarte.
Estoy en los últimos pero no me quiero ir (aunque sé que no pasará, la esperanza no se muere -este es el mal-)
Y la esperanza no debe morir...!! Cuando hay amor y este amor vale verdaderamente la pena, la lucha es digna...
Y pues como dices, si es que en ambos casos no resulta... habrà que largarse... ;)
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